La Sociedad Económica de Amigos del País de La Palma vuelve a revivir de sus propias cenizas, con la intensidad de haber conseguido implicar a buena parte de las instituciones de la capital palmera y al propio Ayuntamiento en impulsar la declaración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad para las Fiestas Lustrales de la Bajada de la Virgen.
Con esta propuesta, la Económica ha despertado del sueño en que permanecía durante esta última etapa de su vida, que comenzó con la reconstitución que protagonizó Carlos Lugo junto a Germán González en el año 2004, y que ahora vive un hito en su historia con esta reaparición relacionada con la Bajada de la Virgen. Luis Martín, miembro de la junta directiva y uno de los impulsores de esta nueva iniciativa, destacó que la Económica renace, sobre todo, con el objetivo de convertirse en “un foro de participación ciudadana”, a través del cual considera que “podríamos darle cauce a movimientos ciudadanos y hacer de correa de transmisión entre la sociedad y las instituciones”.
Este, a su juicio, es el sentido que puede albergar en pleno siglo XXI una institución que nació en La Palma en 1776. “Tiene sentido como foro de participación ciudadana; teniendo en cuenta que uno de los elementos fundamentales de un sistema de democrático es la participación y ahora mismo es muy poca la que existe, ahí está la importancia de que la podamos promoverla desde la Económica”.
Asimismo, Martín indicó que “queremos darle la vuelta” a la imagen de un cierto elitismo y distancia con la sociedad que puede presentar esta institución. “La Sociedad ha sido siempre, y en sus orígenes, dirigida para que los que tienen poder y capacidad presten ayudas a los que no la tienen. Hay un cierto aire paternalista, pero ahora queremos darle la vuelta para que sea un foro de participación”.
Además, cabe destacar que Germán González, exdirectivo de la Económica y creador del Museo de la Educación Rayas, el primero de esta naturaleza que se hizo en España, expresó su voluntad de que el Museo estuviera “entroncado bajo el paraguas de la Sociedad Económica”, según confirmó Luis Martín. Este será otra de las tareas que tendrán que abordar, junto con la confección de las jornadas y exposiciones que sobre la Bajada de la Virgen preparan para este verano.
RECORRIDO
El Cronista Oficial de Santa Cruz de La Palma, Manuel Poggio Capote, divide la historia de esta institución en la capital palmera en cuatro fases. La primera de ellas parte desde su fundación, en 1776, y dura unos quince años, en los que la Económica “fomentó la agricultura y la introducción de nuevas técnicas en el sector”. De 1860 a finales del siglo XIX se produce otra relevante presencia de la Sociedad, que impulsó la creación del Colegio Santa Catalina, primero en la Isla de segunda enseñanza, además de hacerse cargo de la imprenta.
A principios del siglo XX, entre 1900 y 1920, la Económica impulsa la creación de la Escuela de Artes y el Museo Provincial de Bellas Artes. Y la cuarta, que será la penúltima antes de la refundación de la de 2004, entre 1950 y 1970.